
Te traemos una sencilla receta de temporada y de aprovechamiento que podrás comer acompañada de una ración de proteína vegetal (legumbres, tofu, seitán, etc.) para completar tu plato equilibrado vegano. Ideal si sigues una DIETA: vegetariana, vegana, baja en grasas, baja en calorías, sin lactosa, baja en proteínas, sin gluten (no complementar con seitán), rica en fibra, paleo y autoinmune (no alteraciones del tiroides).
Ingredientes (4 persones)
Una coliflor grande
Verduras de preparar el caldo (4 zanahorias y 2 chirivías)
Un puñado de pasas y piñones
Ras el hanout al gusto
Sal
Pasos a seguir
Separamos los tallos de la coliflor del tronco central, descartamos el tronco y nos quedamos únicamente con las flores de la coliflor. Lavamos, escurrimos y trituramos las flores con la ayuda de un robot de cocina hasta obtener unos granos similares a la sémola de cuscús.
En una sartén ponemos a calentar aceite de oliva virgen extra a fuego fuerte y salteamos las pasas y los piñones un par de minutos. Incorporamos las zanahorias y las chirivías cortadas a daditos, y añadimos la sal y las especies (recomendamos empezar con una cucharadita de ras el hanout, probar de sabor e ir añadiendo según nuestro gusto). Removemos y seguidamente añadimos la coliflor en grano, salteamos un par de minutos más sin dejar de remover y servimos.
El grano de cuscús de coliflor se puede preparar con un par de días de antelación y guardar en la nevera. Pueden utilizarse otras verduras pero de esta manera aprovechamos las del caldo. La coliflor y las zanahoria están en temporada.Si te sobra coliflor puedes utilizarla en otras recetas (p.ej. tabulé) o como base de pizza (que ya explicaremos en una nueva recta más adelante).
Recomendación nutricional
Esta receta de aprovechamiento a base de verduras de temporada es una excelente fuente de hidratos de carbono complejos, vitaminas y minerales. La coliflor por pertenecer a la familia de las crucíferas es rica en glucosinolatos, compuestos bioactivos implicados en la prevención de determinados tipos de cáncer. Es rica en fibra y vitaminas antioxidantes (A, C y E). Es, además, una fuente de prebióticos para alimentar tu microbiota intestinal.
Este fantástico cocktail de nutrientes lo convierte en un alimento ideal para prevenir el estreñimiento, y mejorar tu estado de estrés oxidativo (dormir poco, fumar, estrés psicológicos, etc.) y cuidar de tu microbiota intestinal (y tu salud, en general, por tanto).
Autora de la receta
Bio de la autora

Soy Montse, madre de un niño y una niña mellizos. Trabajo como gestora de proyectos en la universidad y en mi poco rato libre, me gusta cocinar, experimentar y descubrir nuevos sabores. Soy de Barcelona pero me encanta perderme por lugares lejanos acompañada de mi familia. Desde que nacieron mis hijos me preocupa cada vez más la alimentación, que se traduce en incorporar más frutas y verduras, consumir productos de proximidad y de temporada y eliminar procesados y azúcares refinados. ¿Lo conseguiré?
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